Cáceres intentó retener y expulsar a los invasores chilenos, mientras Piérola se escapó a la sierra.
Fue impedido por falta de refuerzos y una bala que casi lo deja sin pierna.
Decidió continuar con la guerra, debido a que él quería llegar a un acuerdo de paz, pero que sea honorable, sin desventaja para el Perú.
Cáceres siempre se aferró a su falso orgullo y siempre quiso luchar por el Perú a pesar de las adversidades que tenían.
La esposa de Cáceres, Antonia Moreno, tuvo un papel muy importante al ayudar mucho a los soldados. En esto, pierden a su hijo único varón.
Cáceres se desempeñó, honorablemente, durante toda la guerra, pero fue Huamachuco su última batalla contra los chilenos, estando en desventaja.
Miguel Iglesias, luego, decidIó firmar un acuerdo de paz con los chilenos, lo cual causó desconcierto en los peruanos y total oposición de parte de Cáceres.
A esto se sumó que la gente veía que se prolongaba la guerra y "estábamos completamente perdidos". También, después de la derrota de Cáceres en Huamachuco, este ya no podría controlar a Iglesias.
Entonces, el 20 de octubre de 1883, se firmó el Tratado de Ancón, dando fin a la Guerra del Pacífico.
Luego, Miguel Iglesias fue nombrado presidente provisorio y decidió seguir siendo presidente.
Cáceres de reveló contra Miguel Iglesias, desatándose una guerra civil entre los dos, hasta finales de 1885.
Finalmente, a finales de 1885, Cáceres logró vencer a Miguel Iglesias en la batalla conocida como la “Huarimpampeada”. Así, ambos dimitieron a la presidencia y se nombró a Antonio Arenas como Presidente Provisorio.
Se convocaron a elecciones y Andrés Avelino Cáceres, como único candidato y apoyado por el pueblo, fue elegido, constitucionalmente, como Presidente del Perú.
La recuperación económica fue, principalmente, gracias al azúcar, a su producción y posterior industrialización, dándose paso a la exportación de este producto.
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